El temporal de frío y nieve que azota toda España obligó a cortar el pasado viernes todas las comunicaciones entre Castelló y Teruel. El cierre de la autovía Mudéjar y de la N-232, las principales vías de conexión entre la Comunitat Valenciana y el norte de la península, provocó que más de un millar de camiones tuvieran que estar más de 18 horas parados en Barracas, Segorbe y Altura hasta que se solucionaron los problemas.La Guardia Civil de Tráfico empezó a parar todos los vehículos a las 16.30 horas del viernes en Barracas. El aluvión de camiones, alrededor de 470, colapsó rápidamente todos los aparcamientos y cunetas de la carretera donde los transportistas podían estacionar. Según explicaba el propietario de una gasolinera del municipio "a las 19 horas ya no cabía ni un vehículo más y las autoridades decidieron empezar a parar los camiones en Segorbe". Por su parte, la propietaria de un restaurante cercano a la N-232 explicaba que "los transportistas se resignaban a su suerte" y se preparaban para un fría noche en el interior de sus cabinas.
Una vez ya no cupieron más vehículos en la localidad barraquera, la Guardia Civil empezó a para los vehículos en Segorbe. Según explicó el alcalde de la capital del Alto Palancia, Rafael Calvo, los camiones parados en su localidad fueron dirigidos al polígono de Altura. Allí se pudieron instalar unos 200. Tras llenar estas instalaciones, la Guardia Civil y la Policía Local de Segorbe distribuyeron los vehículos que no paraban de llegar al polígono La Esperanza del municipio. Esta zona industrial llegó a albergar hasta 400 camiones más.
A las 10 de la mañana del sábado la Guardia Civil abrió al tráfico las vías principales y los transportistas ya pudieron seguir su marcha. Vaciar los improvisados aparcamientos costó más de dos horas y necesitó de la colaboración de varios agentes de gestión del tráfico para hacerlo ordenadamente.
"Falta de previsión"
Jose Ramón López, secretario general de la Asociación de Transportistas de Castelló criticó "la falta de previsión" de las autoridades. "Todos los años nieva y todos los años nos pasa lo mismo", aseguró López. Para el representante de los transportistas, estas paradas retrasan los pedidos y "cuestan mucho dinero a las empresas en dietas y días de trabajo".
Fuente: Levante de Catellón
No hay comentarios:
Publicar un comentario